El primo de Danila, quien se había mudado a la gran ciudad de Fortaleza, escuchó de un amigo que trabajaba en el hospital sobre la misión de Operation Smile. Danila, la más joven de 10 hermanos, se ha esforzado gracias al amor y apoyo de toda su familia, pero ella no tiene muchos amigos debido a esa “cosa chistosa” en su cara. Ha sido ridiculizada y la han hecho sentirse fea y poco querida por su deformidad facial. Esto le ha roto el corazón a sus padres.
Ahora, después de la cirugía, Danila no puede dejar de sonreír. Ella es una hermosa y adorable niña a quien le va bien en la escuela, hace sus deberes y ríe con sus amigos como lo haría cualquier otra niña. Su madre ha visto un cambio notable en la personalidad de su hija como resultado de la cirugía.
“Estoy muy feliz de ver a mi hija sonreír todo el tiempo. Le está yendo muy bien, tiene muchos amigos, muchos de ellos nuevos, que vienen todo el tiempo a nuestra casa a jugar con Danila.”