Pero a lo largo de su trayectoria en el cuidado de su hendidura facial, Laura encontró consuelo y confianza durante sus visitas al centro de atención de Operación Sonrisa Colombia, donde ha recibido atención desde que era bebé hasta su temprana adolescencia.
Si bien ha pasado más de una década desde su primera cirugía con la organización, su familia recuerda la incertidumbre y la preocupación que sintieron el día que nació.
Nancy y José Alejandro, los padres de Laura, se sorprendieron al saber que su hija nació con hendidura facial. A pesar de múltiples ecografías prenatales, nunca fue detectada. Al reflexionar sobre ese momento, Nancy se dio cuenta de que los médicos que realizaban sus ecografías nunca pudieron ver claramente su rostro porque su mano siempre lo estaba cubriendo. En aquel momento parecía insignificante. Pero entonces José Alejandro y Nancy vieron la sonrisa de su hija.
“Mi sueño era tener este bebé”, dijo Nancy. “No podía creer que esto estuviera sucediendo”.
En medio de la preocupación que rodeó el nacimiento de Laura, hubo un rayo de esperanza. La suegra de Nancy, que también nació con hendidura facial, les habló de Operación Sonrisa Colombia.
Aunque la atención médica es más fácilmente accesible para las familias que viven en Bogotá, la capital, también puede ser muy costosa. Nancy trabaja como guardia de seguridad y José Alejandro como camionero para una empresa de reciclaje. A pesar de que su padre recibió recientemente un ascenso, ellos sabían que nunca podrían pagar las cirugías que su hija necesitaría.
A los dos días de nacida, Laura visitó por primera vez el centro de atención integral de Operación Sonrisa Colombia. Era demasiado pequeña para recibir atención en ese momento, pero después de conectarse con el equipo médico voluntario local, la esperanza de su familia de haber encontrado una solución se hizo más profunda.
Cuando Laura tenía 11 meses, recibió su primera cirugía. Su madre estaba eufórica al ver por primera vez la nueva sonrisa de su hija. Entre lágrimas de felicidad, Nancy expresó que ni siquiera la reconocía.
“Recordé lo difícil que era antes de la cirugía y cómo tenía que alimentarla con una cuchara y le cubría todo el pecho”, dijo. “Saber que eso había terminado me hizo sentir muy feliz”.
Operation Smile se esfuerza no sólo por cambiar la vida de un niño, sino también la vida de toda su familia.
Además de someterse a cuatro cirugías, Laura también recibió atención continua de ortodoncia y terapia del lenguaje en el centro de atención de Operación Sonrisa Colombia. La terapia es vital para los niños que nacieron con hendiduras faciales porque ayuda a establecer una articulación correcta y nuevos patrones motores del habla.
Laura disfruta especialmente de sus sesiones porque le encanta hablar con otras personas.
Cada vez que visita el centro de atención, se siente más cómoda en el entorno médico. Cuando se le preguntó sobre el centro y cómo la hacía sentir, dijo: “Me hace muy feliz”.
Con la atención integral que ha recibido a través del centro de atención de Operación Sonrisa Colombia, Laura ahora vive una vida más saludable y feliz con mayor confianza y sin el estigma dañino de tener una hendidura facial no tratada.
Laura espera convertirse en veterinaria cuando sea mayor. Pero sus aspiraciones no terminan ahí.
Tiene muchos intereses como el canto, la fotografía y la moda. Es una excelente estudiante que ha crecido sin dejar que las opiniones de otros niños la molesten. Ella simplemente les dice que no le importa lo que piensen.
Su nueva sonrisa es la razón por la cual Operation Smile continúa estableciendo diligentemente más centros de atención y capacitando a más voluntarios médicos compasivos en todo el mundo.