
Al igual que el anterior, realizado en 2020, este nuevo programa celebró el Día Internacional de la Mujer al conformar un equipo conformado únicamente por mujeres. Estas profesionales médicas de todo el mundo donaron su tiempo, pasión y habilidades para ofrecer cirugías y tratamientos multidisciplinarios para la hendidura facial.
Todas las fotografías fueron tomadas por Mariam Moummade.

Más de 80 mujeres de más de 15 países, incluyendo Guatemala, Marruecos, Perú, Brasil, Suecia, el Reino Unido y Noruega se unieron para formar un equipo capaz de proveer tratamiento de primer nivel a niños que esperaban un futuro más brillante y saludable.
Para muchas voluntarias este fue el primer programa integrado solamente por mujeres. La cirujana marroquí Misk Meziane, que participó en el programa de 2020, colaboró con su experiencia y sus habilidades para formar a las futuras cirujanas.
“Una tiene que amar lo que hace. Si no amas lo que haces, no darás lo mejor de ti”, dijo Misk. “La segunda cosa más importante es pensar en el paciente. Es lo que harías si fuera un familiar, hay que hacer lo mejor por el paciente”.

Las residentes quirúrgicas y odontológicas participaron en tutorías y oportunidades de entrenamiento en las cuales profesionales médicas certificadas como Ase Sivertsen de Noruega compartieron conocimientos y técnicas durante simulaciones de cirugía de hendidura facial y talleres sobre salud oral.
Estos talleres fueron liderados por las cirujanas Wafaa Mradmi de Marruecos y la dentista Vilma Arteaga de Guatemala.
“He tenido mucha experiencia en la tutoría de residentes, ya sea en mi país o en el extranjero. Cuando los entrenas, no solo les das el conocimiento médico, sino también les das la capacidad de ser compasivos”, dijo Wafaa. “Hay que tener algo de espíritu, alma y corazón para estar con estos pacientes y saber que sus familias siempre estarán detrás de ellos, y hay que tratar, no solamente al paciente, sino también a la familia”.
Como guardianas de la misión de Operation Smile de mejorar la salud y la dignidad a través del acceso a una cirugía segura, las mujeres que sirvieron en este programa cambiaron la vida y el futuro de 70 familias.

Para muchos de los pacientes la cirugía segura es el primer hito en su recuperación.
La cirugía ortognática adicional, la terapia del lenguaje, la atención psicosocial y más, son algunos de los servicios integrales continuos que el equipo local brinda en sus múltiples centros de atención en todo el país.
“Realmente trato de hacer tanta terapia del lenguaje como se pueda y capacitar a los padres para que hagan la terapia y alentarlos para que su hijo pueda ir a la escuela o volver a la escuela”, dijo la terapeuta del lenguaje voluntaria Candace Myers de Canadá.
“A menudo le digo a los padres: ‘Con bastante trabajo, pueden mejorar su habla y luego pueden ser médicos, cirujanos, enfermeros, maestros. Tu hijo puede hacer cualquier cosa’”.